Si hay algo que no me he cansado de repetir desde hace tiempo, es que esta crisis no es tal y como nos la están vendiendo desde el primer momento.
No hay dinero...
Falta financiación...
El dinero 'desaparece' con la crisis...
Desde un primer momento me he cuestionado lo mismo... ¿a dónde han ido a parar los miles de millones que con la burbuja inmobiliaria llegaron a España en forma de préstamos y que se metió en el ladrillo?
Algunos te dicen que ese dinero ha 'desaparecido' porque ahora los ladrillos ya no valen lo que valían antes, pero me van a permitir que lo dude y mucho.
Porque al dinero al que me he referido siempre, es el dinero en forma de transacciones electrónicas, y el más habitual paquete de billetes de 200-500€ que se han movido, que ha cambiado de manos pero no desaparece a menos que alguien decida borrarlo de una base de datos bancaria.
Por ello, siempre he dicho que una posible solución a esta crisis pasaría por investigar hacia dónde se ha movido el dinero o incluso poner fecha de caducidad a los billetes más grandes para hacer que aflore.
Y esta semana, con la sonada macro-redada llevada a cabo contra el empresario chino Gao Ping, empiezan a aflorar algunos indicios que confirman lo que digo:
200 empresarios usaban la red de Gao para lavar dinero en paraísos fiscales
Al menos 200 empresarios españoles han utilizado o utilizaban en la actualidad los servicios de la red encabezada por el chino Gao Ping,detenido hace unos días en Madrid, para blanquear el dinero que tienen oculto en paraísos fiscales o en países con una legislación laxa, según fuentes de la investigación. La relación entre los españoles y la organización asiática era favorable para ambas partes: los empresarios obtenían dinero en efectivo de forma rápida y fuera de control, mientras que la familia de Gao Ping recibía a la vez en China una suma similar procedente de las cuentas que los empresarios tienen fuera de España.
Para que nos entendamos, resulta que hay empresarios y personas acaudalas (ricos) que tienen mucho dinero no declarado (vaya, vaya, de dónde habrá salido) en Paraísos Fiscales donde lo metieron en una época en la que aquí se vivía muy bien, y que han estado usando la trama urdida por este empresario chino para traerlo de vuelta a España (en forma de billetes entregados por los chinos en mano) sin que Hacienda pudiese descubrirlos.
Y esto hace que me cuestione aún más esta crisis que nos quieren vender cada día, esta crisis en la que los países democráticos juegan con desventaja en un tablero donde otros países impunemente ayudan a expoliarles y esconder el dinero que luego los primeros tienen que pedir prestado a unos intereses cada vez mayores (la famosa prima de riesgo y deuda soberana).
Pero oye... que la crisis se resuelve abaratando costes salariales (rebajando salarios), bajando impuestos a los ricos (esos mismos que ya te han engañado y llevado el dinero a Paraísos Fiscales), abaratando el despido porque los empresarios (esos que tienen ingentes cantidades de dinero negro y usaban la red para blanquearlo) dicen que no contratan porque luego les duesta mucho despedirnos.
Por todo esto deberíamos empezar a ponerle nombre a las cosas... y así nos daríamos cuenta de que no tenemos una crisis, si no muchas:
- La Crisis de las Familias Endeudadas: la de todos los que entraron en el juego y compraban pisos de mierda a 300.000€, y/o cambiaban de coche con una ampliación de hipoteca. Esta es la que está llevando a muchas familias a la ruina, dejándolas en la calle con una trampa difícil de solventar.
- La Crisis de los Trabajo Basura: la de una sociedad empresarial incapaz de crear trabajo de calidad, bien remunerado y que condena a generaciones completas de trabajadores bien preparados a trabajar en entornos que no motivan con salarios miserables.
- La Crisis de la Clase Política: la de una 'casta' que ha montado su particular chiringo donde todos tengan asegurado un buen salario, aunque para ello haya que recortar medios en los servicios públicos dejando que los juzgados se colapsen, los hospitales no tengan medios o la educación se hunda definitivamente.
- La Crisis de la Ética o Falta de Valores: la de una sociedad enferma, con un sistema económico enfermo, donde lo único que importa es el dinero. Un sistema que está cerca de terminar reventando, donde ya no importa crear empresas de las que sentirse orgullosos, que sean admiradas por la sociedad, que sean capaces de crear servicios o productos de calidad. Aquí lo único que importa son los beneficios anuales.
Y de todas, la última es sin duda la peor, porque es la más arraigada, porque es en la que todos estamos involucrados y la que tiene una solución más difícil por implicar al género humano y la necesidad de cambiar muchas cosas en personas dominadas por el egoismo.